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Kiko Mizuhara la modelo japonesa, no muy agraciada de
rostro, tampoco de muy buen corazón, era sin dudar a dudas la “antagonista” en
la historia de la vida de G-Dragon en
este momento la pelinegra estaba en un dilema ¿a quién odiaba más? a
Hikari,quien según ella llego solo para alejarla de su "enamorado"
para hacerla infeliz o a Ji yong quien aún que lo ama, el jamás demostró cariño
especial hacia ella, viéndola solo como amiga, tenía odio para los dos, podría
matar a los dos si quiere pero a la que realmente odia más es a Hikari,con su
mano temblando pero sin dejar de apuntarlos pensaba ¿qué hacer? por el momento
no se movía.
Ji yong tenía que hacer entrar en razón a Kiko, sería difícil
pero tiene que intentarlo, claramente se arrepiente de haber sido impulsivo y
decir lo que dijo, sin dejar de estar enfrente de Hikari como en forma de escudo, empezó a hablarle a
la modelo que estaba furiosa.
— Kiko, escúchame, lo que estás haciendo no tiene sentido ¿sí?
vamos a resolver esto como adultos —la miro con determinación.
—¡Cierra la boca, no quiero "resolverlo" lo
que me hiciste sufrir ya no tiene remedio Ji yong, solo quiero venganza, eso es
lo que quiero! —se le escapa una lagrima que se desliza lentamente en
sus mejillas.
Hikari observaba la escena sintiéndose impotente, no sabía qué
hacer, ni decir, estaba muy débil, sin embargo algo dentro de ella la llamaba,
diciéndole que protege a su amado, a toda costa y ella estaba dispuesta a hacerlo,
con sus almendrados y cálidos ojos que parecían destellar luz, vio como la
pelinegra tiro del gatillo, la bala iba directamente al cantante pelirrojo,
todo parecía verlo en cámara lenta.
La castaña, sin pensarlo se movió de su lugar tomando a ji
yong del brazo con sus pequeñas manos empujándolo con todas sus fuerzas, apenas
y lo hizo mover del lado, pero lo suficiente como para alejarlo del peligro,
recibiendo ella esa perforación dolorosa cercas de su corazón.
—¿Qué? ¿p-por qué se interpuso, es estúpida? —hablo
Kiko frunciendo el ceño pero a la vez sonrió de algún modo satisfecha.
Ji se giró rápidamente al haber escuchado en estruendo de la
bala disparada, mirando como el pecho de Hikari era traspasado y su bata blanca
se tornaba de un color rojo carmesí como su cabello, se acercó a toda prisa y
logro atraparla antes de que cayera al suelo, la tenía en sus brazos, la
castaña tosió brevemente escupiendo sangre
—¡¡No!!! —el pelirrojo soltó un grito desgarrador y la
abrazo para luego mirar a Kiko con odio en su mirada— Kiko, maldita ¡te
voy a matar perra!
—¡F-fue su culpa, n-nadie le dijo que se entrometiera!
La mejor amiga de Hikari; Saya, logró escucho el ruido que
provoco el balazo, preocupándose y llegando con varias enfermeras, abrió la
puerta viendo la escena y no pudo evitar gritar y al mismo tiempo empezar a
llorar
—¡¿Que paso aquí? Hikari!—corrió angustiada llegando
a GD y la castaña quien aún parecía consiente.
—Kiko le disparo a Hikari -le respondió molesto el pelirrojo
para luego ver a la mujer quien le había salvado la vida, miro con profundidad sus ojos medio abiertos, empezó a hablarle-
¡eres una idiota, ese disparo era para mí, yo iba a protegerte, ¿por qué lo
hiciste?
—Ji yong —hablo muy débil Hikari mirándolo a los ojos, con
su pequeña mano acaricio la mejilla de él, mirándolo con tranquilidad— Tú
me salvaste del rio, de ahogarme ¿lo recuerdas? mi corazón me dijo...que —tose— yo
debía protegerte —lo miro derramando una lagrima— A veces se hacen
locuras....-suspira viéndolo- Por amor...Ji..Yong, Te amo —susurro y lentamente cerro sus ojos.
—¡¡Hikari, respóndeme!! —la sacudió no muy fuerte y
sus ojos se empezaron a cristalizar—¡Tch maldición, maldición, maldición!
—Ji yong... —Le hablo Saya tocando su hombro muy seria—
Podemos salvarla todavía, ten fe.
Kiko aprovecho la situación para luego irse lentamente de la
habitacionales enfermeras le pidieron a GD que le entregaran a Hikari para ver
si podían salvarla
—Cuídenla, porfavor, hagan todo lo posible por salvarla —frunció
el ceño con sus ojos brillosos-—Saya, encárgate de informarme ¿sí?
—S-si pero, ¿A dónde iras?
—Tengo que ir a atrapar a esa perra —refunfuño
apretando sus puños hasta que resonaron sus huesos.
El joven cantante, salió corriendo de la habitación a buscar
a Kiko, corrió por los pasillos de nuevo "disfrazado" con sus gafas oscuras,
viendo hacia los lados, parecía no estar cerca >>Tiene que estar por aquí,
no pudo haber ido lejos<< Pensó mientras paseaba su mirada por los pasillo,
hasta que vio una figura casi esquelética por una de las puertas de salida de emergencia,
tenía que ser ella, ya que al instante en que el movió el empezó a seguir la
silueta esta empezó a correr también, huyendo de él, llegando al estacionamiento,
el pelirrojo se limitó a detenerse y mirando hacia los lados.
—¡Sal maldita, ¿dónde estás? no seas cobarde —grito
haciendo resonar sus palabras entre las paredes.
La modelo pelinegra estaba escondida en un auto rojo
agachada de cuclillas, tratando de que no la viera, pensando seriamente en lo que
acababa de hacer ¿de verdad mato a Hikari? si es así está en graves problemas,
Ji yong tenía razón debió meditar más las cosas antes de haber tirado del gatillo,
pero ahora ya no hay vuelta atrás lo hecho, hecho estas y tiene que enfrentar
el problema, soltó un suspiro, escabulléndose entre los autos, llegó a un bote grande de basura, ahí es donde se deshizo
del arma, para “estar limpia” en las manos y se puso de pie dejándose ver a la
vista del pelirrojo, la logro ver y se acercó a pasos firmes.
—Kiko.. —la llamo muy serio.
—¿Q-que quieres Ji yong? —lo miro algo asustada.
—Eres una...una perra maldita —con todo su coraje
la tomo de sus delgados y frágiles brazos empezando a sacudirla— ¡¿Cómo
pudiste hacerme eso, que te hice yo, he? ¡Respóndeme!
—Ji... —derramando lagrimas— L-lo hice porque
esa pobretona estaba interfiriendo entre nosotros amor mío —se liberó
de su agarre y lo abrazo sin soltarlo.
—Aléjate de mí —trata de quitársela pero no
lo logra— Me das asco, está bien si no quieres alejarte, llamare a la policía
-saco su celular de su chaqueta y marco el número.
—¡¿Qué?, no espera!
—¿Ah? ahora si tienes miedo no? —rio
a carcajadas— ¡¡Admítelo te lo mereces!!
—Y-yo ,y-yo tengo a tu madre de mi lado, ella no
dejara que me metan a ala cárcel idiota -se aleja de él molesta.
—Eso ya lo veremos.
Pasaron unos minutos y Ji yong no dejaba ir a Kiko la tenía
tomada del brazo para que no se fuera, esperando a que llegara la policía junto
con su mejor amigo Yong bae, después de unos minutos más llegaron los oficiales
junto con el bailarín del grupo, los oficiales legaron y tomaron a Kiko de los
brazos
—¡Suéltenme yo no hice nada!
—Eso lo veremos —respondió un oficial llevándosela
al vehículo
Yong bae se acercó a GD preocupado y alterado
—¿Estas bien bro,no te hizo nada esa loca? -le
pregunto al pelirrojo tomándolo de los hombros.
—E-estoy bien, gracias a Hikari -bajo la mirada con melancolía.
—¿Qué le paso? .
—Te lo contare en lo que entramos al hospital —se dio
media vuelta serio y su amigo lo siguió por detrás.
Ji yong le contó a Yong bae todo lo que había pasado y el
estado de Hikari,lo que lo hizo ponerse nervioso y muy preocupado, se
encontraban sentados en la sala de espera.
—Espero y no sea nada grabe, Ji ella te salvo la vida
-toco su hombro para darle fuerzas al líder.
—Lo sé, no sé qué vaya a pasar pero quiero que Kiko
page, lo que hizo no tiene perdón de Dios.
—Eso lo se bro, pero a veces la venganza no es buena y
al igual que Dios, hay que saber perdonar -le hablo Yong bae muy serio y con esa
voz tan tranquila.
—Tch... —el pelirrojo se limitó a solo mirarlo para
luego desviar la mirada sin decir más, en eso, su celular sonó en una llamada entrante,
el pelirrojo respondido colocando la bocina del celular en su oreja—
¿Hola?
—¿Qué le hiciste a Kiko? ¿Por qué esta con la policía
Kwon ji yong? —hablo su madre cuestionando y amenazándolo.
—Ah —recordó tranquilo— Eso... —se
rasco la nuca con pereza— Madre, usted no sabe todo lo que esa, esa mujerzuela—cambio
la palabra, ya que sabía que a su madre no le gusta que diga malas palabras y
continuo— Ella hizo sufrir a Hikari yo no iba permitir que la lastimara
mas
—No me importa eso Ji, entiende que yo, yo quiero que
tengas a tu lado a una mujer con buenos antecedentes, de buena familia, Kiko es
la indicada para ti hijo —hablo muy seria.
—Madre, si, admito que me sentí atraído por Kiko por
un momento pero,entiende,ella y yo no congeniamos, no me comprende del todo y
yo no la comprendo, no me tiene confianza, es demasiado celosa y si no hay
confianza en una relación ¿Cómo quieres que funcione eh? olvídalo no me casare ya
con Kiko,ya no —colgó.
—¡¡Ji, respóndeme, no me cuelgues, ah!! –grito molesta
mirando el celular.
—Era tu madre -le preguntó su amigo pelinegro.
—Sí, quiere que me case con esa zorra,ya le dije que
no estoy interesado en ella y mucho menos ahora después de conocerla más a
fondo -serio lo miro el pelirrojo—además quiero quedarme aquí hasta tener
noticias de Hikari.
—Saya me conto que tu diste el dinero para la operación
y el tratamiento de la Sra.Ongaku y me dijo que ya está en buen estado, dentro
de una horas, estará dada de alta —sonrió una pizca.
—¿Enserio? -—suspiro con alivio— eso es bueno, me
alegro -miro al techo- ¿sabes? no comprendo por qué mi madre odia tanto a
Hikari ni si quiera la conoce, cuando sepa algo de ella, iré directo a hablar
con mi madre
—Bueno, tienes mi apoyo en lo que decidas -Yong bae le
palmeo la espalda con gentileza.
.
.
.
Por otro lado en Japón, en el hospital donde estaba hospedaba la madre de Hikari,estaba
ahora en reposo, estaba mejor a como estaba antes, había pasado ya casi una
semana desde su operación, ahora podía hablar bien y respirar mejor, ese dolor
que sentía abajo de su vientre se había ido, su hermana menor Naomi, entro a su
habitación con un vaso con agua entregandoselo,muy seria, al parecer tenía algo
que decirle.
—Shizuka —le hablo a su hermana quien se encontraba
recostada en la cama de reposo, entregándole el agua—Hablo; Kwon Young
Hwan, dijo que él y su esposa quieren verte y hablar de lo que sucedió
—¿Yang Mi ? quiere hablar conmigo suspiro-—creo que quiere resolver
esto con nuestros hijos ¿no?
—S-si podemos ir a corea a hablar con ellos, además
para saber que paso con mi sobrina ¿Qué tal si le paso algo?
—Mi hija, está bien, no te preocupes Naomi, pero
quiero verla —sonrió levemente.
—Suspiro y la miro extrañada- Tu siempre tan
despreocupada ¿eh?.
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.
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Habían pasado dos días después del accidente, Ji yong iba
seguido al hospital a ver si le daban noticias de la chica japonesa de cabello
castaño, mientras que el resto de los Bangs ya sabían lo que sucedia,querían ver a Hikari
pero por ahora no podían así que iban a verse en casa de Yong bae,a apoyar a GD,pero
este no quería irse del hospital hasta que le dijeran el estado de Hikari,Saya tuvo que retirarse por que tenia que ir a cuidar y ver a su hija, por mayor razón el pelirrojo que se quedo ahí, disfrazado y tratando de que no le vieran bien la cara,por
otro lado Kiko se encontraba presa, hasta tener las suficientes pruebas iban a
darle su sentencia, por ahora la tenían tras las rejas, la Sra.Kwon quería ver
a Shizuka para resolver este embrollo en el que se vieron involucrados sus hijos,
según ella quería hacer entrar en razón a su único hijo varon,hará todo lo
posible para que se case con la modelo japonés, mientras tanto las hermana Ongaku
venían en avión a dos horas de llegar a Corea, a resolver este problema de una
vez por todas, sin embargo necesitan a sus hijo con ellos para contarles lo que
paso hace veinte cuatro años, la familia Ongaku y Kwon tienen una pésima
relación repleta de odio y malos recuerdos.
La hermana mayor de
Ji yong; Dami iba directo al hospital donde se encontraba su hermano, ya eran
pasada de las 12:30pm el clima en Corea había bajado de temperatura, anunciando
próximamente lluvia, el pelirrojo aún se encontraba en la sala de espera, como Dami se preocupa demasiado, no dudo en ir a
ver como estaba,yong bae ya se había retirado tenía que ir a calmar a los demás
del grupo por la situación, la mujer de rostro similar al del cantante, llego a
la sala de espera, acercándose a Ji yong,sentándose a un lado de él.
—Ji Yong—lo llamo por su nombre pero este no respondía,
temblaba, ya no tenía sus gafas puestas, sus ojos estaba irritados, rojos casi
como el color de su cabellera, donde tal vez se desahogó en llanto sin que nadie se diera cuenta—No
trates de ocultarme lo que sientes hermanito —le sonrió— Sé
que estabas llorando y cúbrete hace frio —saco una gabardina negra
y se lo puso encima para taparlo.
—Dami —la llamo en tono firme y se tallo con cuidado
sus ojos en casi forma de línea recta— ¿Qué haces aquí? -pregunto sin mirarla-
—¿Cómo que, Que hago aquí? Estaba preocupada, se lo
que paso, tranquillo ella estará bien
—¡¡Casi, casi la tenía de nuevo a mi lado Dami, casi!!
—grito
sin contener su coraje—Pero esa perra la alejo de mi otra vez, me gustaría
saber qué ¿Cómo esta ella ahora? Quiero saberlo, pero nadie me dice nada—bajo
la mirada y saco la cajita roja con listón, donde adentro estaba el collar de
estrella— Esto, con esto le confesare todo lo que me hace sentir —lo
guardo y soltó un suspiro mirando perdidamente el suelo.
—Hermanito, tienes que calmarte, pronto te dirán que
es lo que le pasa —le sonrió.
—Lo sé, pero sabes que no tengo paciencia —se
puso de pie y camino hacia la puerta de la habitación
—E-espera, ¿Qué vas a hacer? —trato de detenerlo
pero no pudo.
—El pelirrojo estaba a punto de tocar la puerta pero
esta se abrió por el Doctor quien lo miro con seriedad y fue directo al grano.
—Ya le hemos sacado la bala, vimos si ninguno de los órganos salió gravemente
lastimado y por suerte no, así que cerramos la herida teniendo cuidado, ahora, estamos tratando de reanimarla, pero
no responde muy bien, además perdió mucha sangre en lo que tardamos en
trasladarla hasta aquí, necesitamos un donador de sangre tipo A, es urgente—los
miro cruzando sus brazos.
—¿Qué? —reacciono Dami preocupada.
—¿Tipo A? —se cuestionó Ji yong recordando— Doctor,
yo soy tipo A, yo puedo donarle sangre a ella ¿verdad? —lo tomo del brazo y
lo miro desesperado.
—¿Encerio?claro que sí, vaya pues que suerte, entonces
acompáñeme —se dio la vuelta y entro a
la habitación.
—Si —respondido serio y se despidió de Dami
entrando.
A dentro, vio a Hikari recostada, alrededor de ella estaban
los paramédicos, examinando el pulso, reacciones fisicas,pulmones,todo,después
de haberla operado hace tres horas, Ji trago saliva y empezó a ponerse nervioso,
no sabía si la podrían salvar era un dilema muy fuerte, siguió al doctor y este
le pido que descubriera su ante brazo, lo sentó en una silla acolchonada y le
clavo la aguja para empezar a sacarle la cantidad necesaria, ji yong por su
parte no despegaba su vista de Hikari,sentía un ligero dolor por la aguja
clavada en su vena pero le dolía mas ver a su “musa” en un estado tan crítico,
le dolía mas por no haberla protegido de Kiko como debía ser, le dolía la
posibilidad de perderla, sus ojos empezaron a ver borroso, se sentía débil, la
imagen de Hikari la veía cada vez más oscura, poco a poco se fue desvaneciendo
hasta desaparecer y el quedando inconsciente.
Después abrió lentamente los ojos con cierta pereza, se dio
cuenta que estaba recostado en una camilla sencilla >>¿Dónde
estoy?<< eso se preguntó, sintiéndose extraño y muy débil, se giró y vio
a Hikari a un lado de el en otra camilla, parecía dormida, él se altero
—¿Hikari? —Abrió sus ojos como plato-
—Ah ya despertaste —le hablo Dami acercándose
lentamente y lo miro con una leve sonrisa.
—Dami ¿Qué me paso?
—Te desmayaste, por qué te sacaron 1 litro completo de
sangre, eso es normal, te inyectaron vitamina B-12 que te hacía falta, estas bien,
además —saco de su bolsa un paquete de sushi y una cajita de donus
crujientes junto con un jugo de naranja poniéndoselo en una mesita- aquí tienes,
debes de comer para recuperar fuerzas.
—Oh —miro la comida— Gracias pero ¿y Hikari,te
dijeron algo de su estado? —cuestiono preocupado.
—lo siento no me han dicho casi nada, pero al parecer
ya usaron la donación y ella aun respira, dicen que es una mujer muy fuerte —le sonrió para
tranquilizarlo.
—Tch —molesto se levantó lentamente sentándose en la
cama—
Eso no me ayuda.
—Ya, deja de quejarte y come —le coloco el plato
enfrente de el— tengo que ver
cómo están los resultados delas pruebas y análisis de Hikari ¿sí? Te veo
en media hora –se dio media vuelta dejándolos solos.
—Suspiro con profundidad- Bueno —sonrió
levemente y se acercó más a la camilla de Hikari y tomo con mucho cuidado su pequeña
mano—
Al menos estoy contigo,descuida,te pondrás bien y cuando ya estés bien, jamás
me separare de ti—sin soltar su mano empezó a comer algo hambriento ya
que desde que se quedó a esperar respuestas del estado de la castaña no había
comido nada, al terminar, se sintió mejor, se puso de pie estirándose, para
luego contemplar a la paciente más hermosa que había visto, su rostro era
impecable, sin una pisca de maquillaje, lucia hermosa.
El líder pelirrojo salió guardando silencio de la
habitación, colocándose sus gafas oscuras, cubriéndose con su chaqueta, su
cabello rojizo lo oculto con su capucha, un poco alejado de la sala de
urgencias, noto que afuera estaba un retrato Jesús ,cubierta de vela aromáticas,
era un espacio donde la gente podía ir a orar por sus seres queridos, él al
acercarse se persino,empezó a orar y a pedir por la salud de su amada, al
terminar se encamino de nuevo a la habitación,
el doctor Kim y las enfermeras no lo dejaron pasar, así que decidió sentarse a
esperar otra vez, en eso le llego una llamada de Dami.
—¿Qué pasa? —pregunto algo alterado.
—Ji, madre va en camino al hospital junto con alguien más
—le
hablo Dami sonando preocupada.
—¿Qué, mi madre, a que viene al hospital? —le
cuestiono molesto.
—No, no lo sé, solo me dijo que te quedaras ahí,
quería hablar seriamente contigo
—¡Bien! —respondido siendo como siempre orgullo—No
me moveré de aquí, de todos modos quería hablar con ella, dile que aquí la
espero —contesto y colgó la llamada guardando su celular.
G-Dragon no tenía idea de lo que quería hacer su madre, pero
eso sí, él quería dejarle las cosas claras, aunque eso sería una tarea difícil,
¿Por qué cuando trata de defender el amor, su vida ha sido así de complicada? ¿Ahora
estaba enamorado? Lo que sentía, lo
quería dejar claro, el Amor es algo complicado, difícil de entenderlo único que
queda es escucharlo, al igual que la música, al igual que sus sentimientos por
Hikari, los tiene que escuchar
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